lunes, 20 de agosto de 2012

1. AUTOESTIMA


El autor nos dice: Que autoestima es ser consientes de nuestros actos. 
Nosotros estamos inmersos en un oseano de creencias, supuestos y prejuicios que consideramos verdaderos, pero no necesariamente lo son. Estar consientes es despertar, sacar la cabeza del agua y darnos cuenta de nuestros comportamientos.   
Autoestima implica conocernos a si mismo. Todos vivimos tan apurados, que no tenemos tiempo para conocer a otras personas. Pero lo peor de todo es que ni siquiera  nos damos un tiempo para reflexionar y conocernos a nosotros mismos. Si estamos despiertos y nos conocemos profundamente, tendremos la capacidad de decidir lo mejor para nosotros.
Si una persona no tiene autoestima sera muy difícil que tome el camino del liderazgo. 

Para llegar al liderazgo, tenemos que tener la capacidad de sentirse competente y seguro, y la capacidad de valorarse y respetarse así mismo. Cuando un gerente tiene baja autoestima su conducta menoscaba permanentemente a los demás, como no se siente competente, necesita creer que los demás son menos que el. Cuando nuestra autoestima es baja, nos comportamos como cuando tenemos un globo con hueco. Tratamos todo el tiempo de inflarlo -es decir, de subir el autoestima. Pero no es fácil, para subir la autoestima de forma real, se requiere de una terapia psicológica seria que permita a la persona tomar conciencia de su conducta e ir construyendo, poco a poco, las bases sobre las que desarrollara su seguridad y valoración. 

Todos somos creadores de profecías, la profecía que se cumple a si mismo ocurre cuando tenemos una creencia tan profunda que actuamos como si este fuese verdad.Como consecuencia, nuestros comportamientos terminan haciendo realidad la profecía. Si pensamos que la economía esta en mal estado, pues seguirá mal. Si pensamos que habrá inflación, pues habrá inflación... Nuestros pensamientos son escultores de la obra de nuestra vida. Como los utilicemos depende solo de nosotros mismos.

Hay que sacarnos la las vendas para competir. Nuestra mente es como un iceberg: una pequeña parte, el consciente, aparece sobre el agua, pero otra, bastante mayor, esta sumergida. Es como cuando trabajamos sin ser conscientes de nuestras conductas y sus consecuencias, estamos actuando desde la parte sumergida. Mientras mas conscientes de nuestros actos estemos, mejor sera nuestro manejo interpersonal y mayor nuestra posibilidad de evitar conflictos innecesarios. 

Aprendamos a desactivar los botones de la mente. Cuantas veces reaccionamos desproporcionadamente, y no dejamos a las personas terminar de explicar su punto de vista. El ser humano tiene "botones" críticos que al ser presionados generan conductas explosivas que destruyen la comunicación. Cuando nos ocurre, es como si un monstruo tomase el control de nuestra mente y de nuestro cuerpo, pero cuando pasa tomamos conciencia de lo que hicimos y nos arrepentimos. Si tenemos una solida autoestima, aun en las circunstancias mas difíciles de la vida nos sentiremos mas seguros y estaremos menos propensos a explotar. Un antídoto para desactivar los "botones" es pensar mas en los demás. No permanecer a la defensiva, tomar una actitud de servicio para comprender y aceptar a las personas.Otro antídoto es la respiración, respirar profundamente nos calmara y desactivara los "botones". Tomemos el tiempo para analizar la situación con calma y elegir nuestras acciones.

En el mundo existe la cultura de la excusa. Cuantas veces, nos quedamos esperando que los éxitos en la vida nos vengan de pura suerte o damos excusas para encubrir nuestra falta responsabilidad y perseverancia. La excusa es la distancia mas corta entre la responsabilidad y la irresponsabilidad. A los que tienen baja autoestima les cuesta mucho admitir sus equivocaciones, pues ello confirmaría que no son competentes. Las excusas nos permiten engañarnos a nosotros mismos y creer que no somos nosotros los equivocados, pues de esa forma evitamos el dolor. Tenemos que cambiar la valoración negativa de la palabra "error", recordemos siempre que un error solo es negativo cuando no aprendemos de el. 

Hay pequeñas metas y grandes logros. En nuestro medio la perseverancia no es una actitud muy popular. Estamos mucho tiempo luchando contra obstáculos sin experimentar gratificaciones a corto plazo. Al buscar gratificaciones inmediatas y no encontrarlas, empezamos a desmotivarnos, a saborear nuestras metas, o simplemente lo abandonamos. la perseverancia requiere que confiemos en nosotros mismos, que seamos capaces de salir adelante por nuestro propio esfuerzo. Trazarse pequeñas metas y lograr pequeñas ganancias nos gratifica, refuerza nuestra autoestima y nos incentiva a seguir luchando. 
Cuando enfrentemos situaciones difíciles, confiemos que al final del camino, si trabajamos con perseverancia, generaremos la mantequilla que nos ayudara a superar obstáculos en la vida.











No hay comentarios:

Publicar un comentario