En el camino a la visión existen muchas dificultades y obstáculos y para superarlos se requiere de creatividad. En el mundo empresarial no podemos caminar por las huellas de los competidores, tenemos que encontrar nuevos caminos que nos permitan alcanzar la cima mas rápido que la competencia. Si queremos avanzar en el camino del líder tenemos que romper nuestros hábitos y estar abiertos a nuevas posibilidades para alcázar nuestra visión.
Creatividad: El primer paso del liderazgo
Los seres humanos una vez que aprenden un esquema, les es muy difícil cambiar. El primer paso para se líder es cambiar e innovar la forma que hacemos las cosas. La percepción nos ancla a esquemas conocidos en la mente y nos dificulta ser flexible para crear. Una vez que aprendemos las características de un esquema y lo grabamos en la mente, es muy difícil escaparnos de el. Para ser innovadores tenemos que luchar contra nuestra percepción que nos obliga a mantenernos en lo ya conocido. Para empezar a romper esquemas, tenemos que empezar a cambiar nuestros propios hábitos.
Cambiar o morir
Los hábitos son como un resorte, si no es estirado con suficiente compromiso, las cosas vuelven a la normalidad. Se debe desarrollar en las personas una actitud de toma de riesgos y de ruptura de esquemas. En el comportamiento de las personas se pueden distinguir dos zonas: una de seguridad y una de riesgo. Para que las personas aprendan a cruzar las fronteras deben actuar en la zona de riesgo, para valorar y perder el miedo. La percepción humana nos permite ver al mundo desconocido y asociarlos a esquemas conocidos; para romper esquemas tenemos que aprender a pasar de algo conocido a un esquema novedoso. Debemos aprender a tomar el riesgo de cambiar nuestros esquemas, que muchas veces nos limitan y nos hacen perder oportunidades.
Rompiendo los candados de la mente
La existencia de "lentes mentales", no nos hace ver la realidad como es, sino como creemos que es. Nuestra mente tiene casilleros de vidrio con candado, el cual actúa en función de sus contenidos, cuando percibe estímulos externos. Nadie puede juzgar o tachar a una persona solo por lo que percibe de sus actos, no tenemos toda la información para formarnos un juicio correcto. Seamos lo suficientemente flexibles para cuestionar y destruir los canales mentales, de esa forma tendremos los lentes claros.
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